En 1913 se produjo el primer caso registrado de radioaficionados que ayudaron a proporcionar comunicaciones en caso de desastre natural, durante las graves inundaciones en el medio oeste de los Estados Unidos.
Por tal motivo, el lema escogido por la IARU para el evento de este año 2013 es: “Radioaficionado: entrando en su segundo siglo de Comunicaciones de Desastre.”